La Religión en la Familia

“En su sabiduría el Señor ha decretado que la familia sea el mejor agente educativo. En el hogar es donde ha de empezar la educación del niño. Allí está su primera escuela. Allí con sus padres como maestros debe aprender las lecciones que han de guiarlo a través de la vida”. (Consejos para los Maestros, pág. 103). “¿Por qué son los padres los primeros responsables en la tarea de transmitir a sus hijos principios espirituales y morales? Porque los padres “están en el lugar de Dios” para sus hijos, para promover cada principio correcto y reprimir cada pensamiento equivocado”. (Conducción del Niño, pág. 453). Debemos recordar que la mejor manera de enseñar y transmitir estos valores a nuestros hijos es a través de nuestra influencia y de una información apropiada; en otras palabras, por precepto y ejemplo.

COMO FOMENTAR LA RELIGIÓN EN LA FAMILIA
• Hay que sacar tiempo para el culto familiar: “Padres y madres, por muy urgente que sean vuestros negocios, no dejéis nunca de reunir a vuestra familia en torno al altar de Dios”. (Conducción del Niño, pág. 492).
• Tener un horario: “En cada familia debería haber una hora fija para los cultos matutinos y vespertinos”. (Conducción del Niño, pág. 492).
• La oración familiar es necesaria: Cada familia debería erigir su altar de oración, comprendiendo que el temor de Jehová es el principio de la sabiduría”. (Conducción del Niño, pág. 489; Prov.1:7).
• Dios hace al padre responsable del Culto Familiar: “Por la mañana, antes de irse a sus quehaceres cotidianos, reúna el padre a sus hijos en torno suyo y postrándose ante el Señor, encomiéndelos al cuidado del poder celestial”. (Ministerio de Curación, pág. 304).
• La asistencia a los cultos cotidianos de la iglesia.
• Participar en actividades familiares de testificación
Secreto: “La familia que ora unida permanece unida”.